Resulta -al menos curioso- que alguien bien enterado de cómo ha sido el desarrollo del fútbol continental, afirme que un equipo aumente su posibilidad de ser campeón internacional por el simple hecho de jugar en la altura. Las estadísticas al respecto niegan rotundamente esta visión errada y lo vamos a demostrar: los equipos que juegan en ciudades de altura apenas han conseguido el 8% de los títulos de Copa Libertadores y Sudamericana, según el siguiente detalle.
En la Libertadores, máximo torneo interclubes de la Conmebol, 55 de los 57 torneos jugados hasta este 2016 fueron ganados por equipos que juegan a menos de 2 mil metros de altura. Así en Brasil: los equipos de Santos la han festejado 3 veces, 2 los de Río de Janeiro, 4 en Porto Alegre, 5 en Sao Paulo y 3 en Belo Horizonte. Los campeones argentinos han festejado: 20 campeonatos en Buenos Aires y 4 en La Plata. Los 3 títulos paraguayos los ganaron en Asunción, mientras que los uruguayos siempre la consiguieron en Montevideo, en 8 ocasiones; y los chilenos la obtuvieron una vez en Santiago. A esas ciudades de menos de mil metros de altura, se suman los 2 títulos que ganaron en Medellín.
Las das únicas ciudades de altura que ganaron la Libertadores son Quito y Manizales. Es decir, los equipos de la altura ostentan apenas un 4% de los títulos de este torneo, mientras que el 96% restante se fueron a ciudades del llano. Si usted no juega en la altitud tiene 24 veces más posibilidades de ganar el preciado trofeo.
Sumemos a este análisis la mucho más joven Copa Sudamericana, que ya tiene 14 campeones. En los próximos meses conoceremos el campeón de la 15ta. edicion. En este torneo, los equipos de altura han tenido un rendimiento bastate mayor, comparado con la Libertadores. De las 14 ediciones, 4 fueron ganadas a más de 2 mil metros de altitud, una en cada una de estas ciudades: Quito, Pachuca, Bogotá y Cuzco.
Las restantes 10 ediciones se quedaron en: Buenos Aires en 7 ocasiones; Porto Alegre, Santiago y Sao Paulo, una en cada una.
Así, en la Sudamericana, el 29% de los títulos se fueron a la altura, mientras que el restante 71% se quedaron en ciudades de menos de mil metros sobre el nivel del mar.
Insistamos en el promedio. El 92% de las Copas de la Conmebol reposan en ciudades de menos de 2 mil metros de altura. Y si para alguien Medellín con sus 1,600 msnm puede ser considerada ciudad de altura, entonces el 88% de las Copas las ganaron en ciudades de menos de mil metros de altitud.
Si jugar en la altura fuera el mayor condicionante para ganar jugando al fútbol, me gustaría saber cuál es la explicación que argumentaría Esteban Dreer, portero de Emelec, por la cual Bolivia no asiste a un Campeonato Mundial desde 1994, la única ocasión en la que jugó un torneo ecuménico ganando el derecho en la cancha. Las dos anteriores (1930 y 1950) jugó por invitación.
Si la altura hace campeones, ¿por qué el Bolivar de La Paz, que juega a 3,600 msnm no ha sido NUNCA campeón de una Copa Internacional?
Y finalmente, si la altura hace ganar partidos y Copas, señor Dreer, ¿por qué Brasil le pegó un baile a Ecuador en los 2,800 metros de altura de Quito, hace un par de semanas en un partido que usted vio desde la banca de suplentes?
Las Copas se las gana con buen fútbol, con jugadores capaces y de jerarquía, con gran esfuerzo, con pocos errores, con alto sentido de autocrítica cuando se pierde y con alto nivel de humildad cuando se gana.
Los equipos de altura han triunfado unas pocas veces, pero cuando han ganado, parece un irrespeto afirmar que su mayor argumento fue la altura, más aún si siempre han jugado ahí y en la inmensa mayoría de las ocasiones, el festejo no llegó; como tampoco ha llegado para algunos equipos del llano, que en cambio, no han logrado construir todo lo otro que es aún más importante para llenar sus vitrinas con trofeos internacionales.
TABLA DE CLUBES GANADORES EN LIBERTADORES Y SUDAMERICANA:
Foto: http://www.quo.es/ser-humano/futbol-de-altura
