La Federación rusa de Atletismo (ARAF), acusada de dopaje organizado, no recurrirá su suspensión provisional, renunciando a ser escuchada como autoriza el reglamento de la Federación Internacional (IAAF), anunció la IAAF en un comunicado este jueves.
Al renunciar a este recurso, la ARAF acepta de facto que su eventual reintegración en el seno del atletismo depende del visto bueno de la comisión de inspección, bajo el mando de la IAAF, que comenzará su trabajo en las próximas semanas.
El anuncio se produce mientras el consejo de la IAAF (gobierno de la instancia), está reunido en Mónaco por primera vez desde que el escándalo de corrupción y dopaje fuera revelado por una comisión de investigación independiente encargada por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), el 9 de noviembre.
“El consejo de la IAAF fue informado hoy de la recepción de una confirmación escrita, procedente de la ARAF, aceptando la plena suspensión sin pedir ser escuchada (…) La ARAF confirma que acepta que la rehabilitación por el consejo se producirá después de las recomendaciones de la comisión de inspección, que decidirá si los criterios han sido cumplidos”.
El 13 de noviembre, el consejo de la IAAF -reunido de urgencia por videoconferencia- decidió suspender provisionalmente a Rusia, abriendo la posibilidad a que los atletas rusos no participasen en los Juegos Olímpicos de Rio, que tendrán lugar en 9 meses.
Rusia fue acusada de dopaje organizado a través de un sistema que implica igualmente a algunos responsables de la IAAF, acusados de encubrir casos de dopaje por interés crematístico.
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