No todo lo que brilla es oro. Aunque el nombre con el que se denomina a las medallas más ansiadas por los deportistas sea ese. Ni en estos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro ni en ninguno anterior existen las medallas de oro. Los que terminan segundos reciben medallas de plata y también los campeones, aunque las suyas están recubiertas por una pequeña capa de oro.

Ese dato fue una sorpresa incluso para los encargados de fabricar las aproximadamente 5.000 medallas para los Juegos de Río.

“Nuestros operadores y algunos de nuestros desarrolladores tuvieron la misma pregunta”, dijo a la agencia AP Victor Hugo Berbert, quien supervisó el proceso de fabricación de las medallas. “Podemos fabricar medallas de oro puro, pero sabemos lo caras que serían. Así que las medallas de oro… no son exactamente de oro puro”.

Según informaron desde el Comité Olímpico, las medallas que serán otorgadas a los campeones en estos Juegos pesan medio kilo, por lo que se estima que si quisieran fabricarlas de oro puro costaría unos 23.500 dólares en materia prima. Al fabricarlas de plata con una pequeña capa de oro brasileño, el valor del metal es de alrededor de 600 dólares.

El proceso de fabricar las medallas usualmente es tarea de la casa de la moneda nacional. Así sucedió este año, y Berbert indicó que el proceso duró unos dos años, desde el diseño hasta la aprobación del COI.

“Teníamos que desarrollar todo el concepto de la medalla. Trabajamos mucho sobre el arte, el diseño, sobre los materiales. Intentamos plasmar su idea en una medalla olímpica, y nosotros usamos nuestra experiencia en producción de medallas para convertirla en lo que ellos querían”, agregó.

El oro está certificado por una cierta pureza y es considerado de muy alta calidad. La plata y el bronce son fabricados en su gran mayoría de materiales reciclados.

Fuente: clarin.com