Néicer Reasco, jugador histórico de Liga Deportiva Universitaria, conversó en Jornadas Deportivas sobre la histórica consagración en la Copa Sudamericana 2009. Néicer se refirió a la actualidad universitaria y recordó varios momentos en los torneos internacionales y su relación con su hijo Djorkaeff. Reasco es el tercer jugador con más partidos jugados en la Copa Sudamericana y el que más encuentros ha jugado con una sola camiseta en el torneo.

La llave con Mushuc Runa

“El equipo de Cumbicus juega bien. Son fuertes, competitivos. Liga está bien. Ganó el partido pasado. Los cambios funcionaron.”

¿Qué era jugar los torneos internacionales?

“Era un placer, un sueño jugar los torneos internacionales. Comenzamos a despuntar desde el 2003, en el 2004 dimos lucha. En el 2005 fue con Oblitas. Desde ahí, fuimos protagonistas y lo cerró el “Patón” Bauza. Volví a Liga con esa casta de haber ganado un título y nos dio la confianza para seguir ganando. El “Patón” abrió el camino para ganar los títulos y después Fossati continuó.”

El primer gol en la Sudamericana

“Hice 5 goles en la Sudamericana. Tuve la chance de haberle marcado el primer gol a El Nacional. El recuerdo de la gente me hace sentir más vivo que nunca. Mi primer gol lo tengo siempre en la retina. Creamos mucho en ese partido con Libertad y no lo podíamos abrir. Fue con la zurda, tuve la oportunidad de hacer el gol y allá empatamos para avanzar.”

La serie con Lanús

“Entré con otra persona al camerino. Cuando termina el partido, me gustaba entrar rápido al camerino. Solo escuché que hubo un tumulto, una pelea. Alguna persona de Lanús quiso armar algo. En el fútbol no hay que ir dando puñetes, hay que guardar la compostura.”

La serie con Vélez

“Emiliano Pinzón era la muela hueca. Les ganamos en el fútbol tenis en el programa Fútbol Para Todos con el Pato Urrutia y Ramber Vera. Fue un golazo del Taca Bieler. Acá Vélez nos comenzó ganando. Tenía un equipazo, era uno de los mejores en ese momento.”

Las semifinales

“Allá fue sufrido, nos salvamos demás con River de Uruguay. Ellos estaban confiados. Dijeron que acá nos iban a ganar y así les fue”. Liga le ganó 7-0 a los charrúas en la semifinal de vuelta.

La final con Fluminense

“Fue difícil el ambiente. Las habitaciones estaban al otro lado de la bulla que hicieron. Comenzaron a hacer sus artimañas, pero no les funcionó. Liga estaba fuerte y con casta de campeón.”

El grupo del 2009

“La gente tenía su carácter y sus momentos de risa, distensión. Ese grupo fue maravilloso. Nos reencontramos con algunos del 2003 en ese 2009. Éramos muy buenos en el fútbol tenis con la “Sombra” Espinoza, el “Paragua” Espínola, “Rámber” Vera. Nos decían las hermanas Williams a mi y a la “Sombra” (risas).

Sobre Édison Méndez

“Tenía una categoría inmensa, un carácter espectacular para luchar por sus compañeros. Esos jugadores son inolvidables. Le mando un abrazo a toda esa gente del valle, la Sombra, (Jairo) Campos, Méndez, “Diablito” (Lara). Al Pato Urrutia, Paraguari, Espinoza, Rámber, Jacinto Espinoza, Dida, Ambrosi. Cuando Méndez, amagaba para correr, no corría. Cuando venía hacia mi, corría. Fue una jugada que nos dio bastantes frutos a nuestro juego de desborde y tiro de centros.”

Sobre la presión y los insultos

“En una ocasión identifiqué a una persona que me molestaba y me insultaba mientras jugaba. Cuando hubo poca gente, lo encaré y lo insulté cara a cara. Tuve que hacer eso un par de veces para que pare. Uno intenta hacer las cosas bien. Nadie es perfecto. Para mí, la presión era estar en buen nivel, no jugar en Liga. La hinchada quiere ganar. Los rivales tienen una categoría. Uno no gana antes de jugar. Los equipos más pequeños dejan la vida, quieren mostrarse. Nosotros a veces nos confiamos. En el Aucas fue la misma presión. En Sao Paulo tenía muchas cosas que Liga no tenía todavía. A nivel de infraestructura y país era lo mismo. Allá estaban Corinthians, Santos, Palmeiras. De atrás para adelante, vamos a ser los primeros. Tenemos una buena hinchada, un estadio bonito, un gran complejo.”

Sobre su hijo Djorkaeff

“No le alcanzaron a robar. Como nosotros somos noveleros, queremos comprar cosas. Quería comprarle algo a la novia. Le han inhibido la señal del carro. Alguien había estado viendo, el ladrón quiso un par de cosas como bolsos con ropa, pero lo agarraron con las manos en la masa. Después tuvo que hacer las denuncias respectivas. No pasó de eso.”

“Lo más duro es pelear el contrato del hijo. Se llega a un acuerdo, se habla, está todo dicho y después, el rato menos pensado que no. Después te hechan la culpa. Liga hizo todo diferente a lo que se había hablado. Djorka no quería irse. Yo quería que se quede. Nosotros queríamos renovar. En principio, Liga no estuvo de acuerdo con lo que Djorka pidió. Yo no soy el representante de Djorka. El terminaba contrato ahora en diciembre. Si yo fuéramos otro tipos de personas que queríamos dañar a Liga, nos parábamos firmes. Queríamos que Liga se quede con algo de un traspaso porque Djorka jugó toda la vida ahí. Liga le comenzó a pagar cuando se fue convirtiendo en profesional. Yo cubrí todos los gastos en el crecimiento de Djorka. Nosotros hicimos las cosas para que a Liga le entre dinero. Djorka y yo somos hinchas de Liga. La gente a veces es muy orgullosa. Yo no tengo por qué difamar a otra persona para arreglar un contrato. Yo me llevo muy bien con mi hijo y no le pido dinero. Yo no me estoy muriendo de hambre ni Djorka gana demasiado como para pedirle dinero. No tengo porque quitarle crédito a él. En mi momento de jugar, tuve una gran mujer a mi lado. Nos divorciamos con Germania y no teníamos efectivo, teníamos bienes. He ayudado a muchos compañeros que me llevan a jugar a diferentes lugares y ahora tengo una cancha sintética. ‘Néicer se botó su plata y quiere ganar contigo’ dicen algunos. La gente a veces queremos depender de alguien, que nos vengan a pedir favores. Si nos pide mucho, bravos y sino también. Para técnico no sirvo y no me gustan las inferiores. Estoy acá en Santo Domingo y voy a Quito cuando puedo. Estoy tranquilo así. Por ahí voy, en el camino de ser empresario.”

Mel y el tenis

“Mel hacía vacacionales de tenis en Brasil. Cuando regresamos a Ecuador, quiso hacer música, ballet. Le dábamos los gustos que ella quería, pero no se quedó con nada. Después le propusimos que juegue tenis y le encantó porque sigue entrenando. Está en Estados Unidos preparándose.”